La ruptura de pareja suele ser un
proceso complicado, con mucha mezcla de emociones. Este proceso se hace aún más
difícil cuando hay niños a los que tener en cuenta a la hora de dar los pasos
necesarios para la separación.
Os damos algunas pautas sobre
cómo facilitar el manejo de las situaciones que pueden surgir respecto a los
niños y la separación de los padres. Si os surgen dudas o queréis comentar
algún caso individual, siempre podéis hacerlo pidiendo cita en el Centro de
Servicios Sociales (918782908), o
contactando con nosotras por medio del correo electrónico (servicios.sociales.daganzo@gmail.com).
- Ten en cuenta que la separación o divorcio de los padres es un periodo de crisis para toda la familia y, por tanto, también para los hijos.
- Toda crisis implica cambios, situaciones que no podemos controlar, y lo no controlable en algunas etapas de nuestros hijos implica que es algo malo y peligroso.
- Los niños son muy buenos observadores y detectan muy bien el ambiente de casa y el estado emocional de sus personas más queridas. Aunque no les hayáis contado que os separáis, vuestro/a hijo/a puede estar percibiendo que algo pasa. No le tratéis como si no se enterara de nada de lo que está ocurriendo.
- No comunicar a los niños los detalles de los conflictos entre adultos ni nuestra percepción respecto a la culpabilidad de cada uno para llegar a esta decisión. No está en la mano de los niños cambiar nada de la situación, y puede ser perjudicial para ellos tener información que sobrepasa sus capacidades y su poder de actuación.
- Si vuestro/a hijo/a os pregunta si vais a separaros, y aún no habéis tomado una decisión, no hace falta que le deis una respuesta a esa pregunta en términos de “si” o “no”. Es importante reconocerle lo que está viendo y viviendo: “mamá y papá últimamente discutimos mucho”, “no hemos hablado de separarnos”,…
- Si habéis tomado la decisión de separaros, lo mejor es que tengáis una reunión familiar, y padre y madre le comuniquéis la decisión y los cambios que van a tener, de una manera clara y concreta, centrando la conversación en ellos, no en las dificultades que como adultos hemos tenido para llegar hasta ahí. Siempre asegurar firmemente que “aunque papá y mamá ya no nos queremos igual, el amor de padres a hijos nunca se acaba”.
- Los niños pueden expresar diferentes emociones ante la sospecha o la noticia de la separación de sus padres. Permitir el desahogo emocional y las preguntas que pueda realizar. Acompañarle en las reacciones que pueda mostrar.
Y, a partir de ahí, como en
cualquier tipo de familia, es importante que tanto la madre como el padre
continúen estando presentes en la vida de sus hijos. Estar presente implica
estar acompañándoles (física y/o emocionalmente) en las distintas cosas que se
vayan sucediendo en sus vidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Este blog se alimenta de vuestros comentarios. Cualquier comentario será bienvenido, siempre que sea respetuoso con los demás.