Últimamente nos encontramos días nacionales o internacionales para
muchas causas y colectivos. Siendo esto así, no podía ocurrir que no
existiera una día internacional para lo que creemos que constituye el
eje sobre el que se mueve cualquier sociedad: LA FAMILIA.
Se habla mucho de los tipos de familia que actualmente existen, de los
cambios que ha dado la sociedad y el reflejo que tiene en los
diferentes modelos familiares… pero independientemente de nuestro
modelo de familia, de su composición, del número de personas que
constituye nuestra familia… lo más importante es TENER UNA FAMILIA, y
SENTIR QUE PERTENECEMOS A UNA FAMILIA.
Cada año, las Naciones Unidas destacan un aspecto importante
relacionado con la familia. Este año se centran en dar importancia al
equilibrio necesario entre la vida laboral y la vida personal.
El tema de la conciliación es algo muy debatido y por el que
escuchamos y emitimos muchas quejas, de las que podríamos estar
hablando durante horas. Pero os proponemos ahora algo diferente.
Habitualmente queremos que cambien cosas que no dependen de nosotros
(por lo menos a corto plazo), pero seguro que hay muchas cosas que sí
dependen de nosotros para fomentar la vida familiar, y algunas de
ellas tienen que ver con la conciliación real. Porque la verdadera
conciliación no es sólo tener un horario compatible con recoger a mis
hijos del colegio, sino que es mucho más y ese “mucho más” depende
sólo de cada persona.
Y, ¿qué se me ocurre que puedo hacer?
Quizá puedo apagar el móvil al llegar a casa o, si por mi trabajo no
puedo hacerlo mucho tiempo, quizá puedo dar una vuelta en bici con mi
hijo o hija sin móvil, dedicando ese tiempo a nosotr@s.
Quizá puedo organizar más mis tiempos y ayudar a organizar los tiempos
de mi familia para compartir tiempo y experiencias que nos gusten a
todos.
Quizá…
¿Se te ocurre algo que puedas hacer y que dependa de ti para que
crezca el espacio dedicado realmente a la familia?
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